jueves, 14 de octubre de 2010

A cualquier otra parte...

Ver,
que ya no piensas en mí,
que ya no crees en la gente,
que tomas pastillas rosas...
Y te has vuelto nihilista.
Y sueñas con no soñar...
Entraría en tu luz
con una canción sencilla,
tres notas y una bandera
tan blanca como el corazón
que late en tu cuerpo de niña...

Estaría tan lejos de ti

que ya no recuerdo el momento
en que te dije por última vez
que el cielo se estaba abriendo...
Y se abre bajo tus pies,
y quiero que vengas conmigo
a cualquier otra parte...

Ver,

que no sabes decir que no,
que vivo en pisos oscuros,
y tengo dos mil razones
para olvidarme de todo
y no pensar más que en tu voz...
Entraría en tu luz
con una canción sencilla,
tres notas y una bandera
tan blanca como el corazón
que late en tu cuerpo de niña...


Estaría tan lejos de ti
que ya no recuerdo el momento
en que te dije por última vez
que el cielo se estaba abriendo...
Y se abre bajo tus pies,
y quiero que vengas conmigo
a cualquier otra parte...




En este momento, creo que esta canción es lo que mejor me puede definir...

martes, 28 de septiembre de 2010

Volver a volver en septiembre...

Y un año más, otra vez volver a la rutina. Pero este año es diferente a los anteriores.

Acabo de vivir el que creo que ha sido el mejor verano de mi vida hasta el momento. Un verano lleno de cambios y de nuevas experiencias que, para bien o para mal, me han aportado algo como persona.

Este nuevo curso se presenta duro y complicado, exige demasiadas horas de trabajo y dedicación. En este preciso momento, me da una pereza increíble afrontarlo. Pero al mismo tiempo, sé que este año voy a emplearme a fondo y a dar lo mejor que tengo dentro, así me cueste la paciencia, los nervios y la poca salud mental que todavía me queda.

Eso sí, primero necesito unos Pilares LEGEN (wait for it) DARIOS.

miércoles, 1 de septiembre de 2010

Heridas

Puedes tropezar.
Puedes caer al suelo.
Puedes golpearte contra el asfalto.
Puedes sentir como tu piel se quiebra lentamente, dando lugar a heridas.
Puede que esas heridas no se cierren.
Puedes incluso tropezar otra vez.
Pero también puede que no te importe sangrar.
Que cada vez que una herida asome por tu piel no sientas dolor, sino indiferencia. Puede que no te importe que tus viejas heridas vuelvan a abrirse.
Incluso puede que al hacerte daño sientas algo similar al placer...
Placer, por sentirte vivo otra vez, tras un largo letargo.


Probablemente, estuve enterrada por demasiado tiempo. Pero ahora lo tengo claro...
Vuelvo a estar viva.

lunes, 16 de agosto de 2010

Siempre hace ilusión estrenar algo...

... y estrenar un blog no es una excepción.

Hoy en día, tenemos a nuestra disposición una gran cantidad de medios en los que nos podemos expresar: Tuenti, Facebook, Twitter, Fotolog... Pero es cierto que todas las reflexiones profundas que se puedan publicar en esos medios quedan un tanto frívolas. Quizá aquella persona que visita tu perfil lo hace solamente para ver tus fotos o para enterarse vagamente de qué haces con tu vida, pero seguramente no le importará lo más mínimo que es lo que ronda por tu mente...

Es por ello que he decidido unirme al apasionante mundo de los blogs. Estoy en una etapa personal un poco rara y sé que tengo muchas cosas que decir...